domingo, 9 de mayo de 2010

Juárez en la sombra

Cuando conocí el reconocimiento que le hicieron a Judith Torrea y la escuché en la radio, busqué su blog y me lo agregué. Esperaba un buen momento tranquilo, para leer sus entradas. Esta mañana lo he hecho. En realidad, sólo la última…


… y he comprendido la razón del Premio Ortega y Gasset de Periodismo.

Como le he escrito, me ha traído recuerdos que guardaba, ya tan lejanos para mí en el tiempo, del miedo profundo de quien no sabe si al salir a la calle será para no volver.

Su voz es la de tantos que no pueden hablar, o ya no saben cómo o por qué hacerlo.

Y es la oportunidad para esa gente del Primer Mundo, para todos nosotros, en realidad, que cerramos los ojos ante la triste existencia de tantos congéneres, para abrirlos, para ver la cruda realidad y actuar de una vez. Hay que parar esa barbarie. No podemos dejar que se quede en una de las “noticias breves” del apartado de Internacional en los noticieros, porque el dolor de esas gentes, su tristeza y su abandono, es también el nuestro.

Os la recomiendo a todos:

http://juarezenlasombra.blogspot.com/

domingo, 2 de mayo de 2010

vergüenza

Un amigo mío está en pleno proceso de separación. Tan “en pleno proceso” que apenas hace dos o tres días presentó la demanda, y pidió, además, la custodia de sus hijos. Según él, su mujer está enferma y no puede ya más con ella.
No quiero entrar en valoraciones. Ni es mi intención ni conozco el caso a fondo, ya que nos hemos reencontrado tras unos añitos de separación (bendito féisbuc!) y he pasado del nacimiento de su primer hijo a la situación actual casi de golpe.
La cuestión está en que mi amigo, al presentar la demanda de separación, se ha encontrado con otra por malos tratos continuados, y tuvo que presentarse al día siguiente a declarar ante la Policía. Supuestamente no irá a más, porque ella no ha podido demostrar nada, y los propios policías le han dicho que para ellos tenía toda la pinta de ser una denuncia falsa, como las que se encuentran tan a menudo.

¡“Tan a menudo”!

Nos hemos habituado a verlas por la tele, y las asociamos a personajes y personajillos que sólo quieren cobrar un pellizco más por otra etapa de su vida, y aunque hay personas que resultan seriamente afectadas, lo acabamos viendo como parte de la farándula...
Pero existen de verdad, en la calle, tal vez en nuestra propia escalera: hay muchas mujeres dispuestas a destrozar a la ex-pareja como sea (¡cuánto no será el odio!), y aunque resulte, por lo visto, "habitual", no es políticamente correcto decirlo en público, porque, efectivamente, hay tantas, tantísimas que denuncian de verdad, que hablar de ello parece que nos coloque del lado de los maltratadores…

Me avergüenza como mujer que algunas utilicen la tragedia de tantas en una “simple” demanda de separación como arma de ataque contra la pareja.